El  3 de noviembre de 2021 el fiscal de la Corte Penal Internacional Karim Khan, y el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, oficializaron la firma de un acuerdo para que la entidad con sede en La Haya investigara las presuntas violaciones a los derechos humanos cometidas en el país sudamericano.

El proceso dio un paso más el 31 de marzo de 2022, cuando la CPI anunció que abrirá una oficina en Caracas para indagar  los hechos sobre el terreno. "Es un paso muy importante, muy significativo, no es algo de cara a la galería”, dijo Khan entonces.

Además, el 16 de abril terminó el plazo que la misma CPI dio al gobierno de Maduro para que demuestre que ha tomado acciones para investigar y sancionar a los responsables de posibles crímenes de lesa humanidad. En paralelo, la CPI abrió una investigación formal a fines de 2021 por los eventuales delitos cometidos por agentes del Estado durante las protestas de 2017, donde al menos 157 personas perdieron la vida.

"Las partes han acordado (...) que mi fiscalía, la fiscalía de la CPI, podrá abrir una oficina aquí en Caracas. Es un paso muy importante, muy significativo", dijo este jueves, sin fijar plazos, el fiscal de ese organismo, Karim Khan, en una declaración conjunta con Maduro. "No es algo de cara a la galería".

Acuerdos como este permitirán "profundizar la cooperación y acelerar nuestro trabajo independiente en relación a la situación en Venezuela de acuerdo a mi decisión de abrir una investigación en noviembre de 2021", expresó su oficina en un posterior comunicado.

La CPI anunció en noviembre una investigación formal por presuntos crímenes de lesa humanidad y firmó un memorando de entendimiento con el gobierno de Maduro para que el país adoptara "medidas" a fin de garantizar "la administración de justicia". Había iniciado en 2018 un examen preliminar por la actuación de militares y policías en el control de protestas que dejaron un centenar de muertos un año antes.

Khan, recibido por Maduro en el palacio presidencial de Miraflores, dijo que se acordó igualmente que Venezuela otorgará "visados de múltiple entrada" a funcionarios de la CPI.

"Venezuela va a contar ahora con esta oficina que nos va a permitir un nivel de diálogo efectivo, en tiempo real, más eficiente, y un nivel de asistencia técnica que permita que el memorando de entendimiento de noviembre siga su curso", expresó a su vez Maduro, cuyo gobierno ha negado siempre que violaciones contra los derechos humanos en el país queden impunes.

Para el líder opositor Juan Guaidó, la instalación de un despacho de la CPI en Caracas es un "avance" para hacer justicia y establecer responsabilidades en violaciones de derechos humanos.

"En Venezuela se han cometido y se siguen cometiendo delitos de lesa humanidad. El anuncio (...) de abrir una oficina de la CPI en nuestro país es un avance para determinar responsabilidades y que se haga justicia, algo que hoy no existe para los venezolanos", indicó Guaidó en Twitter.

Por su parte, el también opositor y dos veces candidato presidencial, Henrique Capriles, escribió en la misma red social que la nueva visita de Khan, sumado al establecimiento de una oficina en Venezuela, "confirma la decisión de la CPI de buscar el camino para que en el país las terribles violaciones de la derechos humanos tengan justicia".