El agua cubre las tres cuartas partes de la superficie de la Tierra y fue crucial para el surgimiento de la vida, pero sus orígenes siguen siendo un tema de debate activo entre los científicos.

Ahora, una roca de 4.600 millones de años que se estrelló contra un camino de entrada en Gloucestershire el año pasado ha proporcionado algunas de las pruebas más convincentes hasta la fecha de que el agua llegó a la Tierra desde asteroides en el sistema solar exterior.