Dos semanas después del inicio de la guerra de Rusia en Ucrania, las fuerzas de Kiev se están preparando para un posible gran ataque contra la histórica ciudad portuaria de Odesa en el Mar Negro.

Ubicada a 300 km (186 millas) al oeste de la península de Crimea anexionada por Rusia, la ciudad es vista como un activo estratégico tanto por Ucrania como por Rusia, y su caída tendría repercusiones significativas, no solo para los dos países, sino también para la comunidad negra más amplia. Región del mar, advierten los expertos.

Las tropas rusas, que avanzan al oeste de Crimea, ya tomaron la ciudad portuaria de Kherson y llegaron a Mykolaiv, a solo 120 km (75 millas) al este de Odesa. Se han visto barcos de la armada rusa cerca de las aguas territoriales de Ucrania, lo que aumenta el temor de un posible ataque desde el mar.

El domingo, el presidente de Ucrania, Volodymyr Zelenskyy, dijo que el ejército ruso está planeando un asalto violento a la ciudad, calificándolo de “crimen histórico”. A principios de la semana pasada, destituyó al gobernador civil de la provincia de Odesa, Serhiy Hrynevetsky, y lo reemplazó con Maksym Marchenko, un coronel del ejército y exlíder del controvertido batallón Aidar, que lucha en la región de Donbas, en el este de Ucrania, desde 2014.

El ejército ucraniano ya estableció posiciones defensivas en Odesa, impuso un toque de queda y bloqueó las carreteras en todas las entradas a la ciudad de un millón de habitantes. Los puertos se han cerrado a la navegación comercial, mientras que ha comenzado la evacuación de civiles.

Odesa tiene una importancia militar y económica estratégica para Ucrania. Después de perder su base naval en Sebastopol tras la anexión de Crimea en 2014, la armada ucraniana trasladó allí su sede.

Sus tres puertos también juegan un papel importante en la economía del país. Alrededor del 70 por ciento de todas las importaciones y exportaciones de Ucrania son en forma de carga marítima, y ​​Odesa maneja alrededor del 65 por ciento de eso.

“Odesa representa un salvavidas fundamental para el extranjero”, dijo a Al Jazeera Alexey Muraviev, profesor asociado de seguridad nacional y estudios estratégicos en la Universidad de Curtin. “Si Rusia se apodera de Odesa, efectivamente aislará a Ucrania del comercio exterior y la ayuda militar”.

La pérdida de la ciudad portuaria podría tener ramificaciones significativas para Ucrania y su esfuerzo bélico y dar a Rusia una ventaja estratégica. Ucrania no tiene otros puertos grandes en los que confiar en caso de que pierda el control de su tercera ciudad más grande, lo que le permite a Rusia dominar efectivamente toda la costa norte del Mar Negro.

“En el contexto de la guerra entre Rusia y Ucrania, la batalla por Odesa jugaría uno de los papeles clave para determinar el futuro resultado político del conflicto actual”, dijo Muraviev. “Para Rusia, el control total de las costas del Mar Negro y el Mar de Azov de Ucrania puede ser más importante que la toma de Kharkiv o el oeste de Ucrania juntos”.