Después de las manifestaciones callejeras en las principales ciudades de Afganistán, las mujeres han recurrido a las redes sociales para protestar contra las políticas de línea dura de los talibanes hacia ellas.

Una campaña en redes sociales ha mostrado a mujeres afganas de todo el mundo compartir fotos de ellas mismas con ropas coloridas tradicionales, bajo el hashtag #DoNotTouchMyClothes.

La protesta es una respuesta a una manifestación organizada por los talibanes en la Universidad de Kabul, donde unas 300 mujeres aparecieron con prendas completamente negras que cubrían sus rostros, manos y pies, un tipo de vestimenta nunca antes visto en todo el país.

Ondeando banderas talibanes, las mujeres dijeron que apoyaban a los militantes que habían anunciado que no se permitiría a ninguna persona de sexo femenino ocupar cargos gubernamentales de alto rango y que las escuelas y universidades debían estar segregadas por género.

Desde que los talibanes tomaron la capital, Kabul, han establecido un gobierno interino compuesto exclusivamente por hombres con solo un puñado de representantes tayikos y uzbecos y ningún miembro de la minoría étnica hazara.

El ministerio de asuntos de la mujer no forma parte del nuevo régimen, que ha recuperado el ministerio de propagación de la virtud y prevención del vicio, asegurando que la sharia se aplique en todo el país.

Muchas mujeres afganas, especialmente en los centros urbanos, temen que sus libertades adquiridas con tanto esfuerzo puedan verse limitadas y recuerdan con preocupación al régimen talibán de 1996 a 2001, que vio a las mujeres confinadas a sus hogares.

Peymana Assad, la primera persona de origen afgano en ser elegida para un cargo público en el Reino Unido, publicó una foto de sí misma con vestimentas coloridas y tuiteó: “Esta es la cultura afgana. Mi vestido tradicional”.

A pesar del anuncio de los talibanes de que solo se permitirían más protestas si el Ministerio de Justicia lo aprueba, las mujeres de Kabul se han comprometido a continuar con sus manifestaciones.