El líder de la oposición polaca, Donald Tusk, dijo el martes que los informes de que el gobierno espiaba a sus oponentes representaban la mayor "crisis para la democracia" del país desde el fin del comunismo.

Un organismo de control de la ciberseguridad dijo la semana pasada que el software espía Pegasus se había utilizado para atacar a prominentes figuras de la oposición, y los medios polacos calificaron el escándalo de “Watergate polaco”.