Una persecución de décadas de un notorio asesino en serie francés parece haber terminado después de que un ex oficial de la policía militar confesara en una nota de suicidio ser el asesino.

El hombre, identificado por los medios franceses como Francois Verove, fue encontrado muerto el miércoles en la localidad sureña de Le Grau-du-Roi, en la costa mediterránea de Francia.

Una nota encontrada junto al cuerpo del hombre de 59 años lo identificó como el asesino apodado Le Grêlé, es decir, el hombre con picaduras de viruela, según informes de los medios franceses.

El ADN de Verove se ha comparado con la evidencia encontrada en varias escenas del crimen, dijeron los fiscales. Se están realizando más pruebas.

Le Grêlé es acusado de cuatro asesinatos y una serie de violaciones desde 1986 en casos que, hasta ahora, no han sido resueltos.

Los delitos incluyen el asesinato en 1986 de una niña de 11 años, Cécile Bloch, en París. Las otras presuntas víctimas de asesinato de Le Grêlé incluían a un hombre, Gilles Politi, de 38 años, una mujer alemana de 20 años, Irmgard Müller, y Karine Leroy de 19 años.

En su nota, Verove confesó haber cometido asesinatos sin dar detalles de las víctimas o circunstancias, informaron medios franceses.

Según los informes, admitió haber experimentado "impulsos anteriores" antes de "recuperarse". Hasta el momento Las autoridades francesas no han confirmado el contenido de la carta.

Los medios franceses dijeron que Verone, quien supuestamente estaba jubilado, se quitó la vida después de no cumplir con las solicitudes recientes de las autoridades que investigaban los crímenes de Le Grêlé.