Miles de trabajadores del sector público británico apoyan hoy una huelga de 24 horas en demanda de mejoras salariales y en contra de recortes de puestos de trabajo. Maestros, bomberos y empleados de ayuntamientos (municipales) en paro y protesta por el congelamiento de los sueldos impuesto en 2010, cuando el Gobierno de coalición llegó al poder, y el lí­mite de aumento salarial del uno por ciento fijado hace dos años. 

La confederación sindical británica Trades Union Congress (TUC, por siglas en inglés) señaló que los sueldos del sector público quedaron muy por detrás del incremento del costo de vida. La secretaria general del TUC, Frances O`Grady, señaló hoy que los trabajadores van a la huelga porque sus sueldos no aumentan al ritmo del costo de vida y culpó de la situación a las medidas de austeridad aplicadas por el Gobierno, que incluyó numerosos recortes en el sector público. 

Por su parte, el primer ministro británico, David Cameron, condenó esta medida de fuerza y prometió reforzar las leyes sobre huelgas para impedir paros masivos de trabajadores. El paro con el mayor impacto es el de los maestros porque millones de padres tienen que buscar alternativas para el cuidado de los niños. 

La secretaria general del Sindicato Nacional de Maestros (NUT, por sus siglas en inglés), Christine Blower, dijo hoy que los docentes "lamentan profundamente" tener que ir a la huelga. "Estamos al tanto de que provoca problemas a los padres. No obstante, a pesar de conversaciones con funcionarios del Gobierno, nuestra disputa por los salarios, las pensiones y las condiciones del servicio no fue atendida", dijo. 

El ministro británico de Educación, Michael Gove, dijo a la BBC que hay que proteger a los escolares de lo que considera es una medida de fuerza "motivada" por razones polí­ticas, argumento usual de las autoridades en estos casos. En varias ciudades británicas habrá manifestaciones de protesta por los recortes del Gobierno, aplicados en octubre de 2010 a los trabajadores por la crisis económica.