Nueva Zelanda ha aprobado una de las leyes antitabaco más estrictas del mundo que prohibirá gradualmente que más y más personas puedan comprar tabaco.

Significa que cualquier persona nacida a partir del 1 de enero de 2009 (actualmente aquellos que se acercan a los 14 años o menos) nunca podrá comprarlo. Como resultado, la edad mínima para comprar tabaco aumentará lentamente.