Nueve de cada diez mexicanos que votaron en una elección revocatoria sin precedentes diseñada por el presidente Andrés Manuel López Obrador lo respaldaron para permanecer en el cargo, lo que subraya su dominio de una agenda política polarizada.

Críticos y simpatizantes habían visto su victoria como una conclusión inevitable en una votación que había alimentado la especulación de que podría abrir la puerta a extender los límites del mandato presidencial, ahora limitado a un solo período de seis años.