Los partidos de extrema derecha de toda Europa han recibido con agrado la noticia de que una coalición liderada por los Hermanos de Italia está a punto de ganar el poder en Italia.

Dado que los resultados completos de las elecciones se conocerán más tarde el lunes, las proyecciones basadas en un recuento parcial de votos mostraron que el partido nacionalista de Giorgia Meloni parecía estar bien posicionado para dar a Italia su primer gobierno liderado por la extrema derecha desde la Segunda Guerra Mundial.

Balázs Orbán, director político del primer ministro húngaro de extrema derecha Viktor Orbán y miembro del parlamento húngaro, fue uno de los primeros en responder, felicitando a Meloni en Twitter.

“En estos tiempos difíciles, necesitamos más que nunca amigos que compartan una visión común y un enfoque de los desafíos de Europa”, escribió.

Santiago Abascal, el líder del partido de oposición de extrema derecha español Vox, también celebró el liderazgo de Meloni y tuiteó que "millones de europeos están poniendo sus esperanzas en Italia". Dijo que ella “ha mostrado el camino para una Europa orgullosa y libre de naciones soberanas que pueden cooperar en nombre de la seguridad y la prosperidad de todos”.

Asimismo, el primer ministro polaco de derecha, Mateusz Morawiecki, extendió sus felicitaciones a Giorgia Meloni en un tuit.

En Francia, Jordan Bardella, de la Agrupación Nacional de extrema derecha, dijo que los votantes italianos le habían dado a la jefa de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, una lección de humildad. Von der Leyen había dicho anteriormente que Europa tenía "las herramientas" para responder si Italia tomaba una "dirección difícil".

Bardella escribió: “Los pueblos de Europa levantan la cabeza y toman su destino en sus propias manos”.

Marine Le Pen, también del partido Agrupación Nacional, tuiteó: “El pueblo italiano ha decidido tomar las riendas de su destino eligiendo un gobierno patriótico y soberanista. Felicitaciones a Giorgia Meloni y al [líder de la liga] Matteo Salvini por haber resistido las amenazas de una Unión Europea antidemocrática y arrogante al obtener esta gran victoria”.