Por primera vez en mas de 15 años, la socialdemocracia alemana logró imponerse a los demócratas cristianos de la actual canciller Ángela Merkel, aunque lo hizo por un muy escaso margen. El recuento preliminar arroja que el partido conducido por Olaf Scholz obtuvo 25,7% sobre el 24,1% del actual partido gobernante.