Según el informe, la cifra probablemente subestima el número de muertos debido a que en algunos casos faltaban elementos de verificación o a que muchas muertes nunca fueron documentadas por ninguna de las cinco fuentes utilizadas.

"El número total puede considerarse como un mínimo de los asesinatos entre marzo de 2011 y abril de 2014", aclara el informe, que no incluye las víctimas de los últimos meses.

El número de muertos establecido en este informe duplica el de hace un año.

La base de datos creada revela que de las víctimas, al menos 8.803 eran niños, de los cuales 2.165 tenían menos de diez años.

Sin embargo, los autores reconocen que el número real de niños muertos también puede ser más elevado, pues la cifra mencionada sólo refleja el limitado número de casos en los que se pudo documentar la edad de la víctima.

"Lamento profundamente que con la aparición de tantos conflictos armados en este periodo de desestabilización global, los combates en Siria y sus consecuencias dramáticas para millones de civiles hayan desaparecido de los radares internacionales", dijo la alta comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Navi Pillay.

La oficina de Pillay compila y verifica a través de un detallado y exigente análisis la información sobre los muertos en la guerra civil de Siria y éste es su tercer informe al respecto.

En el conflicto sirio, que enfrenta a grupos armados rebeldes y al gobierno sirio, el 85 por ciento de muertos son hombres, pero el análisis no consiguió distinguir entre los que eran combatientes y civiles inocentes.

El mayor número de víctimas fueron registradas en la gobernación de la periferia de Damasco (cerca de 39.393), seguida de Alepo (31.932), Homs (28.186), Idlib (20.040), Dara (18.539) y Hama (14.690).

Paralelamente, al menos 70 miembros del Estado Islámico (EI) murieron en los últimos dos días durante sus intentos por tomar el aeropuerto militar de Al Tabaqa, último bastión del gobierno sirio en la provincia de Al Raqa (norte), según informó hoy el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).

La organización, con sede en Londres, contabilizó esta cifra de víctimas mortales desde la noche del pasado martes hasta última hora de ayer.

Los combatientes del EI lanzaron a principios de esta semana una operación para controlar el aeropuerto de Al Tabaqa, y para frenar esta ofensiva, la aviación gubernamental bombardeó posiciones de los extremistas, incluso con barriles explosivos y misiles Scud.

La organización extremista sunnita EI proclamó a fines de junio un califato en las zonas de Irak y Siria que están bajo su control.

En sus filas luchan numerosos combatientes extranjeros, de los 12.000 que se estima acudieron a Siria en estos tres años y medio de conflicto, principalmente procedentes de Túnez, Arabia Saudita y Qatar, pero también de países occidentales (más de 2.500).