"La normalización en Afganistán compete a todas las potencias regionales y naciones de Asia Central, China, India, Pakistán, Irán y, desde luego, Rusia. Es muy importante que los servicios de inteligencia trabajemos juntos en este sentido y debo decirle que cooperamos con la práctica totalidad de los países mencionados", declaró Narishkin en una entrevista con el canal RT.

La milicia talibán*, proscrita en Rusia por terrorista, completó en agosto su ofensiva relámpago contra las fuerzas gubernamentales y reconquistó el poder en Afganistán, tras dos décadas de intervención militar extranjera.

A principios de septiembre, los talibanes dieron a conocer la composición de un gobierno interino, sin ninguna mujer e integrado mayoritariamente por pastunes y partidarios de la línea dura. La mitad de los miembros del gabinete, que iba a ser "inclusivo" según las promesas iniciales, figuran en la lista del Comité de Sanciones 1988 del Consejo de Seguridad de la ONU.