Trepida Europa. El derrumbe del gobierno del primer ministro de Italia, Mario Draghi, supone mayor tensión en un continente vapuleado por la guerra en Ucrania, la nueva ola de la pandemia, la inminente crisis energética por la dependencia de gas ruso, la mayor suba de tasas de interés en los últimos 22 años, una inflación galopante del orden del 7,6 por ciento en la zona euro, un calor infernal e innumerables focos de incendio a raíz de la sequía por la falta prolongada de lluvias.