En el juicio que ha comenzado en la Audiencia de Barcelona, la joven que denunció al futbolista Dani Alves por presunta agresión sexual en una discoteca ha ratificado su versión en una declaración que se ha llevado a cabo a puerta cerrada para preservar su intimidad.

Durante su testimonio, la denunciante afirmó que el jugador tuvo una actitud inapropiada hacia ella y su amiga en la discoteca, describiendo que Alves la agarró de forma indebida y que su amiga también sufrió un comportamiento inadecuado por parte del futbolista. Posteriormente, la denunciante siguió al jugador a un baño donde, según el relato de la testigo, ocurrió la agresión sexual. 

La amiga de la denunciante también manifestó que la víctima mostraba una gran angustia y resistencia a denunciar el hecho, lo que evidencia el impacto emocional que la situación ha tenido en ella.

En el interrogatorio, la abogada de Alves intentó cuestionar la credibilidad de la denunciante, preguntando sobre su vida sexual y tratando de poner en duda los detalles de la agresión. Además, se mencionó que la denunciante está recibiendo tratamiento psicológico y psiquiátrico, agravado por la difusión de imágenes de ella en redes sociales por parte de la madre del futbolista.

El juicio continuará con la presentación de más pruebas y testimonios, siendo este un caso que ha generado un gran interés mediático y que está siendo seguido de cerca por la sociedad.