Israel impidió que Ucrania comprara el software espía Pegasus de NSO Group por temor a que los funcionarios rusos se enojaran por la venta de la sofisticada herramienta de piratería a un enemigo regional, según personas familiarizadas con el asunto.

La revelación, luego de una investigación conjunta de The Guardian y Washington Post, ofrece una nueva perspectiva sobre la forma en que la relación de Israel con Rusia ha socavado en ocasiones las capacidades ofensivas de Ucrania y contradicho las prioridades de Estados Unidos.