El Brexit ha llevado a un déficit de 330.000 personas en la fuerza laboral del Reino Unido, principalmente en la economía poco calificada, según un informe de destacados investigadores.

La salida de la UE en 2020 condujo a un aumento de la inmigración de países no pertenecientes a la UE, pero no lo suficiente como para compensar la pérdida de trabajadores de los países vecinos, según las conclusiones conjuntas de los think tanks Center for European Reform (CER) y el Reino Unido en una Europa que cambia .

Sus cálculos tomaron en cuenta las cifras recientes de la Oficina de Estadísticas Nacionales que mostraron una reducción general en la inmigración neta de 540,000 hasta junio de 2022.

Sin embargo, para evaluar el impacto del Brexit dentro de ese declive, el informe también utilizó la encuesta anual de población de la ONS para ayudar a modelar cómo habría sido la fuerza laboral del Reino Unido si la libertad de movimiento no hubiera terminado y las leyes de inmigración británicas siguieran siendo las mismas.