El gobierno conservador de Antonis Samaras enfrenta desde hoy a varias huelgas que paralizan el sector público en contra de los despidos previstos en el marco de las medidas de ajuste. Por la mañana, la policía dispersó con gas lacrimógeno una manifestación que había bloqueado la entrada al Ministerio de Reforma Administrativa en Atenas.

También comenzó hoy una huelga de tres horas de los profesores de secundaria, así como de los empleados de las aseguradoras de pensiones y de salud, que pararán durante cinco días. El motivo de las medidas de fuerza es la exigencia de los acreedores internacionales a Grecia de que despida a 15.000 empleados públicos hasta fines de 2014.

A su vez, otros 25.000 serán desplazados a la llamada "reserva de movilidad", que podría implicar que pierdan su trabajo el año próximo si no se encuentra un puesto para ellos dentro del aparato del Estado.

El miércoles y el jueves, los empleados públicos pararán durante 48 horas, según la medida convocada por el sindicato que los agrupa, ADEDY.
Los médicos de los hospitales públicos atenderán asimismo desde mañana y durante tres días solamente casos de urgencia. Por ahora no hay indicios de que la huelga tenga impacto sobre el sector turístico.