El Consejo Nacional de Gestión y Reducción de Riesgo de Desastres elevó hoy a 34 el número de muertos, en la última semana, por las inundaciones y aludes de tierra provocados por las lluvias en el sur de Filipinas. En total, unas 460.000 personas en 14 provincias filipinas fueron afectadas por las fuertes lluvias, de las que más de 212.000 se vieron forzadas a desplazarse y están siendo atendidas en 358 centros de evacuación.

Fueron cortadas 57 rutas y 21 puentes y más de 1.300 hogares están total o parcialmente dañados. Las lluvias obligaron a cancelar decenas de vuelos de cabotaje en la última semana, mientras que más de 7.000 pasajeros de embarcaciones tuvieron que cancelar sus viajes a causa del estado del mar.