Andrew Bradshaw, de 32 años, se convirtió en el alcalde más joven en la historia de Cambridge cuando asumió el cargo el año pasado, y ahora presentó su dimisión, de acuerdo con un comunicado de la ciudad publicado en Facebook. 

Bradshaw dijo que decidió renunciar tras “un periodo difícil de autorreflexión” y consideró que este era el camino “correcto” a seguir para la ciudad y para sí mismo, según reportes. Bradshaw indicó que ya no tenía la confianza de sus colegas y que no había logrado mantener las relaciones necesarias con líderes locales, estatales y federales.