"Esta mañana, Alan Gross ha salido de Cuba en un avión del Gobierno estadounidense", explicó bajo anonimato un alto funcionario.


El empresario estaba condenado a 15 años de prisión luego de que, mediante un juicio y su correspondiente ratificación en la Corte Suprema cubana, lo encontraran culpable de espionaje y desestabilización en favor del gobierno de los Estados Unidos.