China reaccionó con iracundia ante la formalización de la alianza militar AUKUS entre Estados Unidos, Reino Unido y Australia, para controlar la zona marítima del indo-pacífico y que otorgará a los australianos, submarinos nucleares a tal fin.

En una rueda de prensa, el Ministerio de Exteriores en Pekín, mediante su portavoz Zhao Lijian ha asegurado que la iniciativa solo servirá para alentar una “carrera de armamento” en Asia-Pacífico y “perjudicará la paz y la estabilidad regionales”.