El país oriental de Corea del Norte desafía las regulaciones por parte de las Naciones Unidas al declararse a sí mismo, mediante una nueva Ley, como un estado con armas nucleares. 

El presidente Kim Jong-un declaró que esta decisión es irreversible y negó futuras negociaciones sobre la desnuclearización. La nueva ley le permite al líder del país realizar ataques nucleares preventivos para protegerse.