Funcionarios chinos y japoneses se reunieron  en Tokio para mantener conversaciones formales sobre seguridad por primera vez en cuatro años, en una reunión destinada a estabilizar relaciones cada vez más tensas.

En la estrategia de seguridad nacional de Japón , publicada en diciembre, se describió a China como “el mayor desafío estratégico” para la paz y la seguridad de Japón.