La ministra de Relaciones Exteriores de Canadá, Melanie Joly, señaló que realizando este cambio en la legislación Canadá se convertiría en la primera nación industrializada del G7 en permitir tales confiscaciones de activos y propone que los aliados hagan lo mismo.

“Había un eslabón débil en [nuestro] paquete de sanciones, que era la capacidad del gobierno de poder vender los activos incautados y luego usar las ganancias para compensar a las víctimas de esta guerra contra Ucrania”, expresó Joly.

Este intento de cambio de legislación se anunció al mismo tiempo en el que se impuso nuevas sanciones a 203 personas acusadas de ser cómplices de los esfuerzos del presidente ruso Vladimir Putin para anexar áreas en la región oriental de Donbas en Ucrania.

Esto cambios en la ley de sanciones significarán que los fondos o las propiedades incautadas a Rusia podrían usarse para ayudar a reconstruir Ucrania o a los afectados por la invasión rusa. Medios locales han dicho que el valor de los activos incautados a los rusos ricos podría superar las decenas de millones de dólares en Canadá, sin embargo, las autoridades se negaron a confirmar una cifra exacta.