Édgar Escobar, de 43 años, "fue baleado esta mañana frente al edificio La Merced de la Fiscalía" en la ciudad suroccidental ecuatoriana, informó la institución estatal. Escobar era el fiscal de la Unidad de Personas y Garantías de Guayaquil.

Trabajó en casos de asesinatos, de organizaciones narcodelictivas, falsedad de información, robos y otros, según destacó el diario ecuatoriano El Universo.

Dos hombres han sido arrestados en conexión con el caso, supuestamente los sicarios que acabaron con la vida del fiscal.

Vídeos en las redes muestran la detención de ambos en plena calle por parte de las fuerzas de seguridad ecuatorianas, que han divulgado sus fotografías.

Guayaquil, la mayor ciudad del país junto a Quito, ha sufrido una fuerte ola de violencia en los últimos meses a cargo del crimen organizado y la delincuencia.

El gobierno de Ecuador extendió por 30 días un estado de excepción el pasado 13 de septiembre. En todo el país se han producido unas mil muertes violentas en lo que va de año, según fuentes citadas por la agencia de noticias Efe.

La mayor parte de los homicidios han tenido lugar en la provincia costera de Guayas, donde también se han disparado los robos y asaltos.

Según señala el último Informe Mundial de las Drogas, publicado por la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito, el puerto de Guayaquil es uno de los principales puntos de salida de cocaína desde Sudamérica hacia Estados Unidos y Europa, principalmente.