El coronel Marino José Lugo Aguilar, un militar vinculado al gobierno de Venezuela, fue encontrado muerto por ahorcamiento mientras se encontraba bajo custodia oficial. Su detención se relacionaba con el escándalo de corrupción en la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA-Criptomonedas). La Fiscalía venezolana informó que Lugo Aguilar enfrentaría cargos por diversos delitos, incluyendo apropiación indebida de fondos públicos, fraude en contratos y lavado de dinero.

La muerte del coronel Lugo Aguilar se suma a otros dos aparentes suicidios ocurridos en el contexto de las investigaciones sobre corrupción en PDVSA. Desde el inicio de las pesquisas en 2023, se han realizado numerosas detenciones y se han emitido órdenes de arresto adicionales. El fallecido militar había ocupado cargos relevantes en Pdvsa, incluyendo la Gerencia de Mercado Nacional durante la gestión del exministro de Petróleo Tareck El Aissami, quien también enfrenta acusaciones de corrupción en el caso PDVSA-Cripto.

Estos sucesos han generado críticas tanto dentro como fuera de Venezuela, con acusaciones de represión y violaciones a los derechos humanos por parte del gobierno de Nicolás Maduro. Líderes opositores y activistas de derechos humanos han condenado las circunstancias sospechosas de las muertes ocurridas bajo custodia estatal, comparándolas con prácticas represivas similares en otros países. La situación ha despertado preocupación en la comunidad internacional y ha generado llamados a la transparencia y el respeto por los derechos fundamentales en Venezuela.

En resumen, la muerte del coronel Marino José Lugo Aguilar en medio de la investigación por corrupción en PDVSA ha generado controversia y críticas a nivel nacional e internacional, alimentando el debate sobre la situación de los derechos humanos y la transparencia en Venezuela.