Hace más de tres semanas, una popular cuenta de Twitter llamada “Anonymous” declaró que el oscuro grupo activista estaba librando una “guerra cibernética” contra Rusia.

Desde entonces, la cuenta, que tiene más de 7,9 millones de seguidores, con unos 500.000 ganados desde la invasión rusa de Ucrania, se ha responsabilizado de desactivar importantes sitios web corporativos, de noticias y gubernamentales rusos y de filtrar datos de entidades como Roskomnadzor, la agencia federal responsable por censurar los medios rusos.