Una de cada cinco muertes en el mundo es causada por septicemia, también conocida como el "envenenamiento de la sangre" o la "asesina silenciosoa"

Según un estudio de la Universidad de Washington basado en registros médicos de 195 naciones, 11 millones de personas mueren al año a causa de esta enfermedad, más de las que mueren por cáncer.  Los investigadores detrás del estudio afirmaron que las cifras son "alarmantes" pues doblan las estimaciones anteriores.