La historia se desarrolla en París en los años inmediatos al final de la primera guerra mundial. Louise Kerlak regresa a la capital y en busca de un trabajo presencia el asesinato de un policía amigo de su padre, muerto en circunstancias dudosas. Culpada de esa muerte, Louise decide tomar la identidad de su hermano para ingresar en la policía, probar su inocencia y limpiar el nombre de su padre.