Después del pago del medio aguinaldo, el Gobierno anunciaría la suba del mínimo no imponible del Impuesto a las Ganancias.

La medida sería retroactiva a enero y las empresas reintegrarían los fondos excedentes a los empleados en tres cuotas.

Si el piso de Ganancias es subido un 15 por ciento, como reclaman desde la CGT, unos seiscientos mil asalariados quedarán excluidos de pagar ese gravamen.