Racing se hizo fuerte en el duelo de ida. Pese a que pasó un breve lapso de zozobra, durante la mayor parte del juego se mostró más firme que su rival y por eso, más allá del resultado, tiene buenas perspectivas para la serie. La Academia recibe a un San Pablo golpeado en busca de la clasificación a los cuartos de final de la Copa Libertadores. La ida en Brasil fue 1 a 1.

Dado que ambos equipos compartieron grupo en la primera fase, ya hubo un duelo en este mismo torneo en el Cilindro, en mayo de este año. En aquel choque igualaron 0 a 0 y San Pablo finalizó con 10 jugadores por la expulsión de William. 

Para este duelo, Juan Antonio Pizzi dispondrá de los mismos once que la semana pasada. Varios de ellos jugaron el último fin de semana, en el encuentro que terminó 0 a 0 ante Vélez en Liniers. De hecho, fueron titulares el arquero, los defensores, a excepción de Juan Cáceres, y los dos volantes centrales que estuvieron en el Morumbí.

El conjunto paulista, de pésimo arranque a nivel local, volvió a perder. Los resultados lo llevaron a estar en zona de descenso, pero antes del partido de ida había conseguido salir luego de dos victorias consecutivas. Sin embargo, el último fin de semana cayó ante Fortaleza y nuevamente su entrenador, Hernán Crespo, volvió a ser blanco de duras críticas.

El encuentro en Avellaneda es crucial para el equipo brasileño por una cuestión deportiva pero también económica, dado que significará un ingreso importante de dinero en un contexto muy complejo para la institución. De todos modos, en los tres duelos disputados hasta el momento entre los dos, Racing siempre fue más.