Los rendimientos de San Lorenzo en los últimos partidos han sido realmente flojos. No sólo ha perdido cuatro de manera consecutiva sino que en casi todos los casos ha estado muy lejos del rival en el juego. En medio de un contexto difícil para el entrenador y con algunas salidas recientes, recibe a Patronato, con la imperiosa necesidad de ganar.

Todas las derrotas del Ciclón han sido duras. Pero, la última hasta los últimos 15 minutos, era de las más desesperanzadoras en los últimos años. Estudiantes le ganó 2 a 0. Sin embargo, durante más de 90 minutos la diferencia era sólo de un gol, pero sideral en el juego. Las goleadas doblegan, desaniman, pero no es tan frecuente ver a un equipo que esté tan cerca en el resultado y que presente tan poca reacción.

En los últimos 15 minutos al menos desde la postura, el conjunto de Boedo cambió. En buena medida, porque le hicieron bien algunas sustituciones y algunos ingresos, que se ganaron el lugar para este duelo. Nicolás Fernández Mercau, Néstor Ortigoza y Ezequiel Cerutti, de lo mejor del equipo en el último encuentro, ingresarán como titulares en lugar de Bruno Pittón, Diego "Torito" Rodríguez, que ya no forma parte del club, y Jalil Elías.

Además, habrá otras dos modificaciones. Gino Peruzzi entrará por Federico Gattoni, en la particular posición de marcador central, aunque en línea de cinco, y en la mitad de la cancha, el joven Siro Rosané entrará por Alexis Sabella. San Lorenzo ya no cuenta en el plantel con los hermanos Romero, que durante el fin de semana rescindieron su contrato con el club.

Patronato es un equipo que se ha mostrado decididamente ordenado en este campeonato. Tiene 12 puntos, algunos altibajos y hace dos que no puede ganar, pero, de todas maneras es un equipo de buena dinámica e interesantes intenciones que puede complicar a muchos, como lo hizo hace dos fechas con Boca, a pesar de que, con polémica, perdió.

El conjunto entrerriano tendrá cuatro regresos fundamentales respecto del último partido ante Banfield. Volverán Oliver Benítez, Gabriel Gudiño, Héctor Canteros y Sebastián Sosa Sánchez. Son prácticamente la base del equipo: el central de más experiencia en el club, el más desequilibrante, el creador de juego y el goleador. Rearmado de esta manera, puede ser aún más peligroso.