El campeón del mundo tuvo un debut muy convincente, especialmente en la faceta ofensiva. Francia arrasó con Australia y pese a que arrancó mal, lo dio vuelta y goleó 4 a 1. Craig Goodwin abrió la cuenta pero Olivier Giroud en dos oportunidades, Adrien Rabiot y Kylian Mbappé se encargaron de poner las cosas en su lugar.