El Millonario está con confianza y se nota. Salió con ese impulso y en los primeros minutos fue punzante y marcó una diferencia notoria en el juego. Tuvo dinámica, buen juego por los costados y un par de remates de Nicolás De La Cruz que obligaron a Lucas Acosta a responder.

El Granate, que es un equipo peligroso, tardó unos minutos en acomodarse en la cancha, pero cuando lo consiguió también tuvo sus oportunidades. En un par de contraataque bien encabezadas por el juvenil José Manuel López pudo lastimar. Incluso tuvo una chance clara, veloz, pero bien elaborada en la que José Sand pivoeó hacia la derecha, fue al área, recibió un pase de Facundo Pérez y en una posición muy próspera no pudo concretar.

Quizás cuando el local pasaba por su mejor momento en la primera mitad, el equipo de Marcelo Gallardo estableció la primera diferencia. Franco Armani sacó largo del arco y Matías Suárez, el jugador más desequilibrante del fútbol argentino mostró oficio y talento. Aguantó la marca, corrió por la banda y se sacó de encima a un rival para luego asistir a Zuculini. El volante ex Manchester City definió de forma magnífica: abrió el pie y a la carrera, desde afuera del área la puso contra el palo izquierdo de Acosta.

El golpe fue duro para Lanús y encima, antes de que termine el primer tiempo, River volvió a golpear con una acción muy similar. De La Cruz condujo un contraataque y abrió para Suárez que otra vez cambió la jugada con pase bien largo. Zuculini la bajó en el área, aguantó de espaldas y descargó para el uruguayo que acompañó la jugada y definió de afuera para poner el 2 a 0.

El segundo tiempo fue un monólogo de River, especialmente desde los 6 minutos en que Carrascal eludió a tres hombres por derecha, tiró el centro, el arquero dio un rebote innecesario y se la dejó servida otra vez a De la Cruz que metió el tercero y el segundo de su cuenta personal.

Luego Lanús pareció decidir que era mejor no recibir más goles. Los Millonarios metieron varios cambios para preservar a sus hombres y se desdibujaron, pero ni aún así Lanús se animo a más. Fue 3 a 0, claro, contundente, a lo River.