River Plate, demolió de visitante a Sarmiento de Junín por 7 a 0 con tres goles de Julián Álvarez, uno de Tomás Pochettino, otro de Enzo Fernández, uno de Ezequiel Barco y otro más de Santiago Simón.

Fue un partido hasta el primero de River y otro luego de ese gol. River, esa maquina infernal que cuando se enciende demuele, se llevó por delante al Sarmiento, que todavía aspiraba a clasificar a la próxima ronda.

Pero a los 35 minutos del primer tiempo, Pochettino abrió el marcador y el mundo cambió, ese partido, que era partido pese a la diferencia de jerarquía, ya no lo fue. Un minuto después Álvarez amplió el marcador y antes de terminar el primer tiempo, el mismo delantero clavo el 3 a 0.

Fue Enzo Fernández el que siguió incrementando la diferencia a los 8 minutos de la segunda etapa y Barco a los 15 ya ponía el 5 a 0. Otra vez Álvarez amplió el marcador y a falta de 15 minutos Simón redondeó el abultadísimo resultado.

Fue 7 a 0. River es arrollador, imposible de controlar, cuando tiene un buen partido aplasta al rival que sea, esta sábado le tocó al pobre Sarmiento, que no hizo un mal partido, pero que enfrentó un equipo "fuera de liga".