Para cualquier fanático argentino del básquet, ver jugar a cualquiera de los miembros de la legendaria Generación Dorada es un placer. Por cuestiones de edad, son cada vez menos los que quedan en actividad por lo que solamente puede apelarse a la nostalgia. O, a situaciones de absoluta excepcionalidad como esta, Juan Ignacio "Pepe" Sánchez volvió a jugar profesionalmente luego de nueve años, por la cantidad de contagios que tenía su equipo, y la rompió.

El histórico base de paso por la NBA se desempeña en un cargo directivo, ya lejos de la cancha. Había jugado su último partido oficial el 25 de marzo del 2013. Su club había acumulado seis casos positivos de COVID-19 y si bien llegaban reglamentariamente con el mínimo de jugadores disponibles para poder competir, quedaban muy diezmados.

Pase de lujo de Sánchez.

Por eso, incentivaron al campeón olímpico en Atenas 2004 a sumarse al equipo. Recibió la habilitación de la Asociación de Clubes y jugó en el partido ante Gimnasia. Pero no sólo jugó, tuvo un partido excelente y fue determinante en el triunfo de su equipo por 91 a 87 en tiempor suplementario. Regresó a la cancha con lujos y el talento absolutamente intacto.

Otro lujo del campeón olímpico.

Curiosamente, fue el debut de Sánchez en la división, dado que nunca había jugador en la Liga Argentina, la segunda categoría del básquet nacional. Dejó una planilla memorable: 12 puntos, 8 asistencias, y 8 rebotes, cerca del triple doble.

Triple clave en el cierre del partido.