Era un duelo con una enorme historia y no decepcionaron. Inter y Liverpool jugaron un buen partido en el Giuseppe Meazza y el conjunto inglés, de mayor jerarquía, supo plasmar su superioridad en el resultado. Se impuso 2 a 0 con goles de Roberto Firmino y Mohamed Salah por la ida de los octavos de final de la Champions League y encaminó la serie.