El partido, convertido en un clásico del hockey femenino a nivel internacional, se jugará a las 21, en el estadio de Natación y Gimnasia, en la capital tucumana, y será televisado por la Televisión Pública.

Previamente, a las 18.30, se celebrará la otra semifinal que protagonizarán Australia e Inglaterra, dos equipos que tienen argumentos de sobra para aspirar a estar el domingo en el encuentro que definirá el título.

Las Leonas exhibieron un rendimiento que fue de menos a más y en cuartos de final fue el equipo que logró el pase a la siguiente instancia con mayor holgura al derrotar a Corea por 3 a 1, luego de recuperarse de una desventaja inicial.

Las campeonas olímpicas, si bien ganaron los cuatro partidos jugados hasta el momento, tuvieron dificultades en algunos encuentros y en la noche del jueves superaron a Nueva Zelanda por 1 a 0.

Holanda muestra signos de agotamiento físico en algunas jugadoras que parecen sentir el rigor de las elevadas temperaturas que se registraron en la provincia.

"Sabemos que todos esperaban este partido en la final, pero si queremos ser campeonas tenemos que saber enfrentar a cualquier rival en cualquier momento", señaló la estratega Luciana Aymar sobre el próximo encuentro de Las Leonas.

Noel Barrionuevo, por su parte, señaló que "respetamos a Holanda como lo hacemos con todos los equipos que enfrentamos pero nosotros queríamos estar en las semifinales y no nos importa el nombre del adversario".

Las malas noticias para el equipo argentino es que Barrionuevo fue sancionada de oficio por la Federación Internacional debido a una jugada que protagonizó en el partido del jueves contra la coreana Yang Peng y ambas deberán cumplir una fecha de suspensión.

La Confederación Argentina apeló la sanción y espera que la medida sea modificada para contar con una jugadora que es fundamental en la estructura colectiva del equipo nacional.