Aquel bochornoso encuentro en Brasil y Argentina jugado en San Pablo, que se suspendió a poco de haber empezado por problemas con migraciones nunca había tenido una resolución oficial. Por supuesto, con las dos selecciones ya clasificadas, la FIFA llegó a una resolución que además le resulta, como casi todas sus decisiones, muy lucrativa. El duelo deberá jugarse y será en terreno neutral.