Spa, casi afuera de la F1

Stefano Domenicali negocia intensamente durante las últimas semanas para formar el calendario menos europeo de la historia de la máxima en 2023, con sólo ocho carreras en el Viejo Continente.

El mítico circuito de Spa-Francorchamps está muy cerca de salir del calendario de la F1 tan pronto como 2023. Las reuniones dirigenciales de Canadá, tras intensas negociaciones de Domenicali con organizadores (o candidatos a) de Grandes premios, hicieron surgir la posibilidad de un GP de Francia en Niza, que podría entrar en lugar del aburridísimo (pero ecclestoniano) trazado de Paul Ricard Y del de Monaco.

Pero también el GP de Bélgica está en veremos. Es que, con la entrada en 2021 de Zandvoort (que fue un éxito esperable a nivel de público y un exitazo inesperado a nivel de espectáculo), los circuitos de la Zona ADAC (una especie de ACA alemán que se extiende a gran parte del norte y el centro de Europa) ya son tres (ninguno de ellos en Alemania): Spa, Zandvoort y Spielberg. Si, como parece pretender Domenicali, sólo un tercio de las carreras de 2023 se correrán en el Viejo Continente, parece difícil que dos quintos de esa cantidad se concentren en el norte de Europa.

En ese contexto, Austria sigue firme porque es la casa de Red Bull y Países Bajos es inamovible por muchísimos años, merced al fenómeno Verstappen. Con Alemania remisa a volver (tras la Era Schumacher, ni siquiera los cuatro títulos de Vettel generaron un nivel de expectación similar entre los germanos, pero sobre todo a nadie le excita fundirse, como casi les pasó a Hockenheim y Nürburgring, por pagar el insostenible, para las economías europeas, canon de un Gran Premio), Spa es la opción más obvia para salir, pese a ser el trazado más querido por pilotos y público en Europa.

También avanza la idea de regionalizar el campeonato (es decir, abandonar el tiradero de plata de este año, con viajes de Bakú a Montreal en una semana, por poner sólo un ejemplo). Así, los Grandes Premios europeos que que ya tienen contrato son los de Silverstone, Hungaroring, Barcelona-Catalunya, Imola, Zandvoort y Monza. Si Mónaco acepta subir su módico canon, el más bajo que admite la FIA, y con Austria al parecer inamovible por las razones antedichas, estarían repletas las ocho plazas europeas.

Lo único que podría salvar a Francia y Bélgica para el año próximo sería la caída de otros grandes premios: México está en veremos, Sudáfrica parece muy verde para 2023 y China todavía no abrió sus fronteras tras la pandemia.

                   Audi casi adentro de la F1

Por otro lado, según el diario suizo Blick, la marca Audi, parte del consorcio VolwsWagen, ya compró el 25% del paquete accionario de Sauber, y habría un acuerdo de palabra por otro 50%. ¿Cuándo se concretaría el anuncio? En cuando la FIA confirme el reglamento técnico para 2026, o sea, a más tardar en el otoño boreal.

Como se contó en Continental Web hace semanas, Sauber (y en menor medida, por una cuestión geográfica e idiomática, Williams) reunía las condiciones buscadas por el grupo alemán para entrar con equipo propio a la F1: no un equipo que sea un cascajo vacío con una fábrica medio prestada (tipo Haas), sino una escudería con un expertise tecnológico que garantice un punto de partida muy alto para su equipo y que además permita generar ingresos en negocios adyacentes gracias al intenso desarrollo tecnológico que demanda la F1. De hecho, el túnel de viento de Sauber ya es usado hace años por Audi.