Estar en el momento adecuado y en el lugar preciso a veces tiene recompensas inesperadas y el mundo del fútbol es terreno fértil para oportunidades tan inverosímiles como soñadas. Desiré Segbé Azankpo, el chofer de Sadio Mané, jugará en el equipo filial del Bayern Munich.

La historia parece absolutamente increíble pero tiene su explicación. Azankpo y Mané compartieron inferiores y se hicieron amigos en el Generation Foot de Senegal, a pesar de que el primero es de origen beninés. Ambos pasaron juntos al Metz de Francia e hicieron sus primeros pasos profesionales allí.

La carrera de ambos se bifurcó: mientras que Mané llegó a ser una figura mundial, determinante en su seleccionado y en el Liverpool, Azankpo anduvo por clubes menores, muchos del ascenso francés. Sin embargo, a mediados de año y tras un préstamo poco exitoso en el Dinamo de Bucarest, finalizó su contrato con el Dunkerke de la tercera división francesa y quedó libre.

Allí fue cuando su amigo del fútbol se acercó a él para ofrecerle una oportunidad laboral. Aznkpo comenzó a ser el chofer del senegalés y lo llevaba desde su casa hasta el centro de entrenamiento de su nuevo equipo, el Bayern Munich. Luego de hacerlo durante algunos días, decidió quedarse para observar algunas prácticas del equipo y pudo tomar contacto con directivos del club y contarles su historia y su carrera como jugador.

Desde el club bávaro le ofrecieron una chance inmejorable: jugar en el Bayern Munich II, el equipo filial. Así como el Barcelona tiene a su equipo B y el Real Madrid tiene al Castilla, el club más poderoso de Alemania tiene un segundo equipo que tiene mayoría de juveniles y compite actualmente en la cuarta división. El chofer y amigo de Mané será dirigido por Martín Demichelis, quien comenzó a desarrollar su carrera de director técnico en la filial del equipo donde más se destacó.