Pirelli lo hizo de nuevo: tras los estallidos de neumáticos en Bakú (y curándose en salud de los estallidos de Silverstone 2020), impuso 'por cuestiones de seguridad' neumáticos con carcasa más dura, y Mercedes solventó, al menos a una vuelta, sus problemas con los neumáticos. 

Por la mañana, en la única Práctica libre antes de entrar a Parque Cerrado, Verstappen había asustado sacándoles 7 décimas a los Mercedes y más de un segundo a casi toda la parrilla (la excepción fue Norris, segundo a centésimas pese a marcar su vuelta con los neumáticos medios). Parecía demasiado, incluso para ese "medio segundo extra" que el público británico les da a sus pilotos, según afirmaba un tal Nigel Mansell.

Pero se sabe que Mercedes esconde los viernes, y de entrada en la Qualy 1 Hamilton empezó a mostrar las uñas. Si bien Max mantuvo su superioridad, Lewis cerró esta primera parte de la Clasificación a sólo 30 milésimas. Toda la parrilla, excepto los Haas, quedó en un segundo y medio en la Q1; quedaron eliminados Tsunoda, Raikkonen, Latifi, Schumacher y Mazepin.

En la Q2, Russell se ganó la primera gran ovación de la tarde colándose en la Q3 en otro sábado estelar con el desangelado, pero no agonizante Williams. Hamilton llegó al minuto veintiséis segundos y le sacó casi tres décimas a Max y siete y media a Bottas. Las Ferrari seguían en la cima del segundo pelotón (cuarto y quinto a menos de nueve décimas). Completaron el top Ten: Checo, Russell, Vettel, Ricciardo y Norris.

En la primera salida de la Qualy 3, Ham hizo bramar al público al clavar la que sería la pole definitiva. En la segunda salida de esta última parte, Russell se puso séptimo y arrancó otra ovación desde las tribunas repletas.

En su segundo intento, Hamilton venía bajando todos los records en los dos primeros sectores, pero casi pierde totalmente la cola del auto en el final del tercero; le alcanzó para salvar la pole, pues casi nadie mejoró y Verstappen, que sí lo hizo, se quedó a 7 centésimas. Bottas quedó tercero a unas dignas 19 milésimas.

Leclerc confirmó las buenas sensaciones de Ferrari con un cuarto puesto a 69 centésimas, dos por encima del quinto Pérez; a 76 milésimas quedó Norris, que se ubicó sólo 2 milésimas atrás en el séptimo puesto; octavo glorioso puesto de Russell (a 83 centésimas, por encima de Sainz, a 87, y Vettel, el único Top Ten que quedó a más de un segundo de la pole provisional).