La FIA iba a anunciar hoy la sanción a Red Bull y Aston Martin por sobrepasar el límite presupuestario. Ayer filtraron que las sanciones serían leves y habló de ‘rumores infundados’ sobre los equipos antes nombrados. Todo parecía indicar que los austríacos iban a superar con total impunidad la presunta pero flagrante vulneración del límite presupuestario. Hoy se ve que la rosca Ferrari / Mercedes funcionó, porque no se atrevieron a hacerlo oficial. 

El ente rector del deporte motor se juega su credibilidad en la medida: el límite presupuestario fue anunciado con bombos y platillos, va por su segundo año en serio y se comenta en el Paddock que Red Bull se pasó en cinco millones de euros del tope establecido para 2022. Mattia Binotto cifró en medio segundo la diferencia de ritmo alcanzable con ese plus invertido en ‘I&D’. 

Si todo acaba en tibias multas sin consecuencias deportivas, será una burla directa de Red Bull a la FIA y a su medida de ajuste presupuestario, ya que los efectos de ese plus de inversión se prolongarán hasta 2023, y todo en el contexto de la congelación en el desarrollo de motores. Por ello, ben Sulayem y su equipo patearon el anuncio de las posibles sanciones al 10 de octubre: señal de que bajo la mesa se están dando con todo, Red Bull para obtener impunidad, Ferrari y (por puro despecho, porque no van nada este año) Mercedes para que el eventual gambito presupuestario no quede impune. 

"La FIA ha observado significativas especulaciones y conjeturas sin fundamento en relación a este asunto, y reitera que la evaluación está en curso y se seguirá el debido proceso sin tener en cuenta ninguna discusión externa", decía el comunicado difundido en las últimas horas. En cambio, el último comunicado corrige: "La FIA informa que la conclusión del análisis financiero de 2021 de los equipos de Fórmula 1 y la posterior publicación de los Certificados de Cumplimiento del Reglamento Financiero no tendrá lugar el miércoles 5 de octubre. Dicho análisis es un largo y complejo proceso que está en curso y concluirá el lunes 10 de octubre para permitir la entrega de los Certificados”, farfulló la FIA. 

Por todo lo cual, después de un fin de semana caliente en Singapur, con Toto Wolff pidiendo la hoguera para Red Bull y Christian Horner amenazando con juicios por difamación a quienes acusen a los austríacos ‘sin fundamento’, el weekend próximo en Suzuka promete mucho más morbo que el propio de la actividad en pista.