El 31 de enero a las 23.59 cerraba el mercado de pases en el fútbol de Europa. Contra las agujas del reloj terminó de cerrarse uno de las ventas más importantes de la historia del fútbol argentino y, sin dudas, la más onerosa. Enzo Fernández fue transferido al Chelsea en una cifra cercana a los 120 millones de euros.

Las negociaciones fueron difíciles. El Benfica, dueño de su pase hasta el martes, se negaba a negociar al campeón del mundo, uno de los mejores jugadores del equipo, en una temporada en la que pueden llegar lejos, no sólo a nivel local, sino también internacional. 

El conjunto más importante de Portugal no sólo lidera ampliamente su liga, sino que tiene aspiraciones de realizar una campaña histórica en la Champions League, dado que avanzó como primero de grupo, por sobre el PSG, y enfrentará a Brujas en los octavos de final.

Es por eso y por el hecho de que recientemente concretaron la venta multimillonaria de Darwin Núñez, los que le dio a la institución una enorme tranquilidad económica, que el legendario Rui Costa, actual presidente del club, no quería dejar salir a su mejor futbolista por menos que su clausula de recisión.

La misma ascendía a 120 millones de euros, que el Chelsea debía abonar de manera inmediata y en un pago. El club inglés ofertaba una cifra levemente superior, pero en diversas cuotas. Finalmente, y pese a que la presión del futbolista fue muy inferior a la ejercida durante la primera negociación, la operación se cerró.

Fue finalmente por ese valor, que se dividirá en seis cuotas, la primera de las cuales será de 45 millones, mientras que el resto será de 15. Además, el jugador firmará contrato por ocho años, es decir que será una pieza esencial en la reestructuración del equipo que actualmente marcha en el 10° lugar de la Premier League.

Esta venta fue una gran noticia para River también, quien se llevará 34 millones de euros por esta transacción. Ese monto corresponde al 25% que tenía del pase del futbolista, más lo correspondiente a derechos de formación. Sin mencionar este último rubro, el Millonario cobrará el porcentaje que le corresponde en cada cuota.

La venta del campeón del mundo se transformó en la sexta más cara de toda la historia del fútbol, solo por detrás de la de Neymar al PSG, la de Kylian Mbappé al mismo club, las de Phillipe Coutinho y Ousmane Dembélé al Barcelona y la de Joao Félix al Atlético Madrid.

Por otra parte, es la venta más cara de un jugador argentino. Superó a la de Gonzalo Higuaín, que llegó a la Juventus por 90 millones de euros y a la de Ángel Di María, que pasó al Manchester United por 75 millones.