En los próximos días, teóricamente esta misma semana, la FIA anunciará el calendario 2023 de la F1. En este contexto, resulta muy significativa la visita de varios directivos del ente rector del deporte motor al circuito de Kyalami, viejo escenario del Gran Premio de Sudáfrica. Y Spa, pese a sus sustanciosas inversiones para mejorar la seguridad y la comodidad de su circuito, quedaría afuera del Mundial tan pronto como el año próximo, si la inspección en Sudáfrica es positiva.

Steve Nielsen, director deportivo de la F1; Craig Wilson, director de rendimiento; y Richard Springett, director de seguridad de circuitos y rallies de la FIA, evalúan el legendario escenario sudafricano, que debe asfaltar más de cincuenta mil metros cuadrados de escapatorias actualmente de hierba y grava. Deberán variarse algunas curvas por seguridad, y mejorar los accesos del pit lane y los mecanismos de seguridad médica. Difícil tarea por el poco espacio disponible.

En este contexto, Sebastian Vettel y Max Verstappen ya deploran la eventual salida del circuito de Spa, considerado el más emocionante para los espectadores y el más desafiante para los pilotos de la F1. "Sería una gran pena perder Spa. Es mi pista favorita en el mundo. Creo que es una pista increíble para un monoplaza de Fórmula 1, para cualquier coche para ser honesto, con todas las curvas de alta velocidad", adujo el campeón reinante.

El tetracampeón alemán agregó que "Spa es una pista increíble. No conozco a ningún piloto al que no le guste conducir en Spa, mientras que sí que conozco pilotos a los que no les gusta el circuito de Rusia, no porque sea Rusia, sino por la pista", ejemplificó Vettel.

El Gobierno nacional de Bélgica ya expresado su apoyo (material) a la organización del GP de Bélgica, justo en medio de una inversión multimillonaria de los administradores del circuito semipermanente para mejorar la seguridad de Spa, a consecuencia, principalmente, de la muerte de Antoine Hubert hace pocos años.