Jermell Charlo consiguió unificar los cuatro títulos del peso superwalter, despues de derrotar por knock out al argentino Brian Castaño en el décimo round de modo inapelable, y desmoronó así las expectativas generadas en la pelea anterior, que fue empate por puntos y donde quedó la sensación que le habían "robado" la pelea al "Boxi".

Charlo pareció superior en buena parte de la pelea. La tarjeta de Continental, al momento del desenlace, daba dos puntos por encima a Jermell, aunque Castaño, había logrado conmoverlo en un par de rounds.

El "Boxi" nunca conseguía rematar su buenas combinaciones, cuando achicaba la distancia frente a un boxeador con mayor longitud de brazos que lo mantenía a raya, y le asestaba una buena combinación, siempre aparecía un contragolpe de Charlo que le prendía las luces de alerta y moderaba su ataque.

Son boxeadores diferentes. Castaño avanzaba en el ring buscando acorralarlo, Charlo jugaba con sus piernas buscando ángulo, se desplazaba por el cuadrilátero con elegancia y parecía mas entero físicamente.

En el séptimo asalto, una mano de Jermell pareció conmover al "Boxi" que nunca regreso al combate. Desde allí, perdió iniciativa y sus golpes no volvieron a hacer daño al rival, y el desenlace anticipado dependía mas de Charlo que de el mismo.

Y llegó en el décimo. El campeón golpeó duro a Castaño que cayó a la lona. Se levantó, pero en pésimas condiciones y Jermell salió a ejecutarlo, cosa que consiguió y dio por sepultadas definitivamente, las dudas y por sentenciada la pelea.