Boca Juniores le ganó a Quilmes por 3 a 2 y pasó a las semifinales de  la Copa Argentina. Marcaron Darío Bendetto, Javier Morales y Luca Langoni para el ganador y Julián Boneto y Mariano Pavone para el Cervecero.

Jugaron un gran partido. Quilmes en especial, que juega en una divisional de ascenso y de la jugó de igual a igual a uno de los líderes del torneo de primera división. No especuló ni por un minuto el cervecero. Siempre jugó y fue al frente.

Generó tantas situaciones de gol como Boca y más. Faltó jerarquía y un poco de fortuna en la definición. De hecho, Quilmes empezó ganando, con un gol de Julián Bonetto, con apenas 5 minutos de partido.

El tema fue que mucho no le duró, y solamente dos minutos después, Darío Benedetto igualó el pleito. Siguieron yendo u viniendo, las posibilidades de gol se mutiplicaban y fue Javier Morales, quien desequilibró para el Xeneize a los 35 minutos poniendo el 2 a 1.

Así se fueron al descanso. Y a los 15 minutos del segundo tiempo, el pleito parecía liquidado, cuando Luca Langoni estiró la cuenta  a favor de Boca Juniors colocando el 3 a 1.

Pero Quilmes jamás se rindió y a los 20 fue el legendario Mariano Pavone quien descontó para el Cervecero. En ese momento, el partido debió suspenderse por indicidentes creados por la barra de quien acaba de descontar.

A patir de allí el partido perdió emoción. Las llegadas ya no eran las de antes y el que creaba mas peligro era Boca. De hecho, hubo dos salvadas milagrosas de Quilmes, con pelotas estrellándose en los palos.

En definitiva Boca es semifinalista y enfrentará a Paronato, vencedor de River, por un lugar en la final del torneo.