Boca pasa por un buen momento y recuperó el nivel individual de muchos de sus jugadores de mayor jerarquía. En base a eso viene con una racha muy ganadora y también logró imponerse a Godoy Cruz, que estaba invicto desde la llegada de Diego Flores. El Xeneize se impuso 2 a 1 en La Bombonera en un partido peleado y se metió de lleno en zona de Copa Libertadores. Tomás Badaloni abrió la cuenta y Frank Fabra y Luis Vázquez dieron vuelta el partido.

El Tomba tuvo un mejor arranque. Volvió a demostrar que es un equipo que trata bien la pelota, que juega por abajo y que tiene mucha dinámica. Había realizado un par de avisos, como un remate de afuera de Martín Ojeda, cuando a los 10 se puso en ventaja. Elías López que estaba muy activo robó y se mandó al ataque. Metió un cambio de frente para Valentín Burgoa que metió un gran centro al segundo palo y Badaloni cabeceó a contra pierna de Agustín Rossi, flotado y convirtió.

Boca reaccionó rápido y estuvo cerca de empatar. Agustín Almendra le envió un buen pase a Vázquez que ya ha mostrado que para su contextura es muy veloz. Ganó por la banda, encaró hacia el arco, desparramó a Guillermo Ortiz con un enganche y definió muy mal de zurda.

Pasado el ímpetu de la búsqueda de Boca el juego se hizo de ida y vuelta. El visitante se dedicó a sumar jugadores que lleven la pelota al ataque desde la defensa para tener superioridad numérica. Y, por otro lado, hizo un esfuerzo denodado por finalizar los ataques y no dar lugar a contragolpes.

Además presionó al Xeneize que se arrimó por resoluciones individuales y por malas salidas del equipo mendocino, pero nunca pudo sortear colectivamente la presión impuesta por el rival, especialmente sobre Jorman Campuzano y Almendra. Solo a partir de Aarón Molinas pudo juntar algunos pases en tres cuartos de cancha.

A los 37, el local consiguió igualar con mucha responsabilidad de Juan Espínola. Movió la pelota de derecha izquierda hasta que Juan Ramírez profundizó con un buen pase, Fabra entró al área por la izquierda y el arquero de Godoy Cruz le regaló el primer palo al colombiano que simplemente dio un pase hacia la red para empatar.

Quedó poco tiempo pero el equipo de Sebastián Battaglia aprovechó el envión anímico y consiguió el segundo tanto ante un desconcertado equipo visitante. Tuvo una chance clara con un mano a mano en el que Vázquez llegó a definir con el arquero muy encima y no lo pudo superar. Pero, poco después, Almendra aceleró desde la mitad de la cancha, tiró un sombrero y le dio un pase al delantero tan simple como efectivo. Esta vez Vázquez definió bien, ante Espínola que otra vez tuvo dificultades al ceder el primer palo.

Ya en el segundo tiempo el Tomba volvió a salir con decisión. En una jugada con muchos momentos de riesgo, Badaloni estuvo cerca de convertir de taco tras un centro bajo de Burgoa, pero Rossi se la quedó.

Boca de contraataque tuvo varias chances de liquidar el partido. La primera ya a los 11 minutos, con una buena corrida de Cristian Pavón tras pase de Vázquez. Pero el delantero ex Talleres controló mal, se acercó demasiado al arquero, se quedó sin ángulo y definió al cuerpo del arquero.

Cerca de la media hora, tanto Norberto Briasco como Ramírez tuvieron nuevas chances. El equipo dirigido por Diego Flores se expuso pero cada vez generó menos riesgos y los conducidos por Battaglia aprovecharon los espacios, pero no concretaron.

Así como en la primera mitad el Xeneize no había hecho tanto como para irse arriba en el resultado, en el complemento el Tomba no hizo méritos suficientes como para empatar. El triunfo del local es una muestra de su jerarquía y de que volvió a ser el de hace un tiempo: un equipo que no requiere un dominio abrumador para convertir y ganar.