El comienzo de la temporada 2022 de F1 registró la mayor audiencia de un GP en los Estados Unidos desde 1995. Alcanzó un millón y medio de espectadores en el final, con un promedio de un millón trescientos mil espectadores.

Según la medición de la firma Nielsen, el GP de Bahréin del año pasado tuvo un promedio de 927 mil espectadores. El registro más alto en las últimas décadas corresponde al GP de Brasil de 1995, con 1,75 millones de espectadores.

Es un ejemplo más de la sinergia creada entre el éxito de la serie 'Drive to Survive' en Estados Unidos, que conquistó sobre todo al público adolescente, y el crecimiento de la propia F1 como espectáculo, sobre todo en el último año.

Ya con el debut de Miami en el calendario de este año, y Austin, que sobrevivió desde 2012 al vacío habitual que sufría la F1 en ese país, renovada contractualmente (y también en su asfalto, dicho sea de paso), además se cree que podría entrar Las Vegas en el próximo campeonato, 2023.

En este contexto, Stefano Domenicali, CEO de Liberty Media, reiteró su convicción de que el Mundial puede ampliarse a 30 carreras. Hasta 2025, el Pacto de la Concordia admite 24 Grandes Premios por año. Domenicali citó no sólo a Las Vegas, sino una segunda carrera en China, como las opciones más potables, pero no descartó a África.

No obstante, Domenicali insistió en que algunos Grandes Premios clásicos de Europa que pagan cánones simbólicos podrían perder su lugar: sobre todo (aunque no los nombró), Mónaco y Bélgica.

"Depende de nosotros tratar de encontrar el equilibrio adecuado considerando cuáles son los lugares en los que les gustaría estar en la F1, cuáles son los valores históricos que necesitamos ver en el calendario", deslizó el hombre que destruyó Ferrari.